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miércoles, 7 de agosto de 2013

"Paseo a la Upper Canada Village y a Fort Henry"


 PasePaseo a la Villa del Alto Canadá”
   (Upper Canada Village)
Por: Taimí Antigua Lorenzo
Fotos: de la autora


Entre los sitios históricos más interesantes que usted puede encontrar en las orillas del río San Lorenzo en Canadá, se encuentra sin dudas esta fiel reconstrucción de una villa típica de los campos canadienses en los años 1860s aproximadamente. Ubicada en Morrisburg, Ontario, es un lugar donde se vuelve al pasado y el tiempo “pasa volando”, es como sumergirse en la magia de antaño al constatar cómo vivían las gentes de campo en el siglo 19. Estuve de visita recientemente con mi familia y fue verdaderamente un paseo muy enriquecedor y agradable.



Recorrido de una hora: Incluye la taberna de Cook, Crysler Hall, la finca Loucks, la oficina de Impresión de la gaceta y uno de los molinos (molino de harina, la fábrica de lana o el aserradero).

Recorrido de dos horas: Incluye la fábrica de lana de Asselstine, los molinos de vapor de Bellamy para hacer harina, el molino de la playa, la taberna de Cook, la tienda Crysler, la casona Crysler Hall, la tienda de la costurera, la finca de Loucks, la oficina de impresión de la gaceta, la casa de la escuela, la finca de Ross y la tienda del herrero.

Aquí les describo los edificios históricos en la Villa del Alto Canadá.

                                                      (Casa típica)

La fábrica de lana de Asselstine

La fábrica brinda los acostumbrados servicios a los hilanderos y tejedores locales. Esto muestra la aparición de un nuevo sistema fabril mecanizado.

La panadería
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En un gran horno de ladrillos, los panaderos producen pan de harina trillada en los molinos de Bellamy. Dicha panadería era necesitada para los negocios, desde el ferrocarril, los canales o el tráfico de buques de vapor hasta como complemento del comercio local. Al final de su recorrido puede comprar estos panes.

El aserradero de la playa

Usando la sierra movida por el agua, naturalmente, este molino tradicional aún corta madera para el mercado local.Aserraderos de este tipo eran comunes e indispensables en una sociedad ampliamente dependiente de la madera y del cobijo.



                                                               Carruajes de la época

Molinos de vapor para hacer harina


Impulsado lo mismo por una turbina de agua, que por un motor de vapor, este molino mayormente automatizado, muele el trigo para hacer la harina y se responsabiliza con las necesidades alimentarias de la comunidad.

La herrería

El herrero les pone herraduras a los caballos, repara vagones y arregla la maquinaria para sus emprendedores vecinos. Un buen herrero era una "ventaja" en su comunidad.

El fabricante de escobas

El fabricante de escobas usa maíz (Sorghum vulgare) importado desde el sur de la frontera para producir escobas para el mercado local.A mitad del siglo 19 las escobas hechas a partir de maíz se habían hecho populares porque eran superiores a las hechas de ramitas, leña o de paja.

El carpintero

Además de hacer reparaciones, el carpintero hace muebles a pedido y otros artículos de madera para los clientes locales.Presionado duramente por fábricas mecanizadas de muebles y sillas, él también ensambla partes producidas en grandes cantidades para poder seguir en el negocio.

Iglesia cristiana

Construida en 1837, esta majestuosa iglesia blanca alberga a la dignificada, formal liturgia y a la música de la congregación anglicana, una de las principales denominaciones protestantes en el área.

Taberna de Cook y caballeriza

El guardián de la taberna ofrece alojamiento, comida y bebidas. Los caballos y carruajes podían ser alquilados. Las pequeñas tabernas semejantes a estas servían progresivamente a la clientela local. Antiguamente se vendía una refrescante zarzaparilla (bebida obtenida de la raíz de la planta sarsaparilla) o la cerveza de jengibre. También se exhiben juegos de mesa como ajedrez y damas chinas que muestran cómo se entretenían los parroquianos de la época. Justo al lado se pueden alquilar coches para pasear por la villa.
El día que fui, los músicos andaban montados en estos carruajes anunciando su espectáculo.


Crysler Hall


Esta edificación fue el hogar de un próspero terrateniente. Alberga muchas muestras del siglo 19, incluyendo las espectaculares ventanas de vitrales que una vez adornaran la iglesia anglicana de St. John en Crysler, Ontario, y las ventanas de vitrales pintadas y fabricadas por el famoso Harry Horwood para la mansión de J. P. Wiser en Prescott, Ontario.

















La tienda Crysler


La tienda ofrece una amplia gama de productos y servicios requeridos por la comunidad. Los dueños de tiendas compraban sus enseres de vendedores mayoristas en Montreal y actuaban como una casa de clarificación (pago de deudas o cheques) para trapos, madera, leña para el hogar y manufacturas locales. Ellos frecuentemente ofrecían servicios postales.

Dentro de la tienda me llamó la atención esta antigua máquina para moler café: mi infusión preferida.¡No podía dejar de mostrar este detalle!

Centro de hallazgos

El nuevo Centro de hallazgos de la Villa del Alto Canadá ofrece exhibiciones completamente nuevas, con lo último en tecnología interactiva, que cuentan las fascinantes historias sobre la vida en los años 1860s a lo largo de las orillas del río San Lorenzo. Un excitante show audio-visual cuenta la importancia nacional de la batalla de la granja de Crysler y de la guerra de 1812.¡El Centro de hallazgos es la forma perfecta de comenzar su recorrido hacia los años 1860s!

*Fuera de la villa se puede tomar un trencito que lleva a los visitantes a ver el sitio exacto de una batalla contra los americanos. Se atraviesa un túnel, donde con tecnología moderna, se muestra cómo ocurrió la batalla, se escucha el sonido de los cañones y otras armas, todo de manera muy real.

La casa de la costurera




La costurera promete a las señoras vestirlas con trajes según las últimas modas de Londres, Nueva York y París. 
                                                    Planchas de la época

Ella podía ornamentar un sombrero o coser prendas de vestir de manera que ambos quedaran hechos a la moda y prácticos para cada ocasión.

                                                 Rueca para hilar
                                               
Casa del motor

La casa del motor alberga a la "Reina", el coche de bomberos bombeado a mano, y es el centro de las actividades de la compañía local para incendios. Los dueños de molinos frecuentemente jugaban un rol central obteniendo el equipo para combatir los incendios en sus comunidades.

Centro de actividades familiares
(Abierto julio y agosto)

Los niños visitantes tienen la oportunidad de probar con sus manos entretenimientos de los años 1860s. Están en el programa juegos de estrategia y oportunidad, artesanías populares del siglo 19 y juegos al aire libre como carreras, saltos y volar papalotes.

Oficina de impresión de la gaceta
El equipo de la gaceta hace un periódico completo con noticias locales, anuncios, una columna literaria, publica consejos agrícolas y noticias extranjeras copiadas del telégrafo y de otros periódicos.

Granja Loucks


Una granja que opera completamente practicando un tipo de agricultura "mixta".Loucks muestra el uso del caballo para la siembra, el amontonamiento del heno y la recogida de la cosecha. La mecanización estaba comenzando en este periodo en muchas de las granjas establecidas. 

Esta granja tiene una casa, que en mi opinión es la más bellamente amueblada y conservada. Con el piano en la sala, una cocina exterior junto a la caballeriza y otra interior con comedor, que se usaba solo en invierno. 


También tiene su huerto para hortalizas en el fondo, como casi todas las casas de la época que cultivaban vegetales y especies para condimentar las comidas.

La casa del pastor luterano


Los luteranos locales construyeron una confortable residencia para su pastor, cuyas enseñanzas religiosas y morales apoyaron la devoción de muchos alemanes protestantes en esta área.

La logia masónica


Muchas comunidades en los 1860s tenían una logia donde fraternidades tales como los masones eran especialmente activos al promover la moralidad pública y privada y haciendo buenas obras. La logia fue abierta oficialmente al público el 21 de junio de 2008.


La casa de McDiarmid


 Esta es una casa típica de clase media, granjeros que prosperaban y compraban terrenos, comerciaban, etc.

La casa del médico

El intérprete le explicará el rol del doctor dentro de la comunidad y los últimos avances en la medicina. Muchas personas continuaban apoyándose en remedios menos científicos como homeópatas o comadronas.
En mi conversación con la guía, conocí que el Dr. no recibía a sus pacientes en la casa. Alguien sano lo buscaba, y él acudía a casa del enfermo. Las curas las realizaba en la mesa de la cocina con ayuda  de algún familiar. A cambio recibía los servicios en “especie”. Por ejemplo: si curaba al herrero, éste se ocupaba de los caballos del Dr. Si curaba a la costurera, ella le cosía sus traje, etc.

Capilla de la Providencia
Era un lugar para los metodistas episcopales locales. Esta capilla es el centro para las lecciones de la escuela dominical, conciertos de caridad y reuniones de la Temperancia (movimiento social que luchó contra el alcoholismo). Los metodistas eran la denominación más numerosa en el oeste de Canadá.

La casa de Robertson
La casa de Robertson muestra la vida de una próspera familia de clase media cuyas raíces loyalistas eran evidentes en el mobiliario y en el estilo arquitectónico de principios del siglo 19 de la casa.

Granja Ross
El campesino gana su dinero cortando leña y a veces, vendiendo productos de cobre tales como cubos de madera. La leña apilada era vendida a la Gran Línea del Ferrocarril, a los vapores del río San Lorenzo, a los residentes locales y a los molinos. Las mujeres de la granja realizaban tareas caseras, incluyendo la confección de tejidos, como se muestra en el interior.

La casa de la escuela 
La escuela común, apoyada ahora por impuestos a la propiedad, está abierta a todo el que quiera aprender, aunque la asistencia no es obligatoria.Una vez allí, a un estudiante preparado en conductas y costumbres morales.

El zapatero

Hacer zapatos es uno de los oficios más comunes en los 1860s. Usando herramientas manuales y hormas de madera, el zapatero fabrica o repara una gran variedad de botas de cuero y de zapatos que están en demanda, incluyendo zapatos rudos con clavijas ("brogans"), un ejemplo del tipo de zapato que usaba la clase trabajadora en ese periodo.

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La torre de señal del telégrafo
La torre es una réplica modelada después de las torres usadas durante la guerra de 1812 para trasmitir códigos militares navales a lo largo de la frontera. La mayoría de estas torres, obsoletas porque usaban el código morse telegráfico, fueron derribadas o vendidas por los años 1860s. Los visitantes pueden escalar hasta arriba para tener una vista panorámica de la villa y del río.

La finca del campesino arrendado


La familia de la granja alquila la tierra y se apoya en los bueyes y en simples implementos manuales para terminar su trabajo. Muchos campesinos arrendados aspiraban a tener su propia tierra una vez que hubieran adquirido suficiente capital.

El hojalatero
El hojalatero hace una gran variedad de utensilios de metal para el uso doméstico y de la granja. Sus brillantes, ligeros y relativamente baratos utensilios de metal eran un reemplazo popular para utensilios de peltre, de madera y de loza. Yo los encontré tan lindos que quise comprar algunos, pero no están en venta.

La fábrica de queso del gremio

Un incremento en la producción de leche llevó al surgimiento de fábricas de queso, tanto en el sector privado como en la cooperativa por los años 1860s.
El queso canadiense del tipo “cheddar” era producido para exportarlo y como fuente de dinero duro en medio de una economía ávida de dinero. Al final del recorrido usted puede comprar quesos producidos en esta fábrica, pero les advierto que son bastante caros.

El hotel de Willard

El hotel de Willard era un popular alojamiento durante la noche a lo largo del alto San Lorenzo. Hoy en día el hotel restaurado es un restaurante del periodo que ofrece a los visitantes a la Villa del Alto Canadá una parada de descanso donde ellos pueden comprar alimentos típicos de los 1860s, servidos por camareros vestidos a la usanza de la época.

                              La despedida(mi esposo, mi mamá y mis hijos Luis y Alexander)

Nota: Los tickets cuestan $17.50 por cada adulto, los niños entran gratis. Si usted este verano va a la Villa del Alto Canadá puede recibir con su entrada un segundo ticket válido para visitar Fort Henry, y eso hicimos pocos días después.

“Visita a Fort Henry”

Fort Henry

                                                  (Foto tomada de internet)
Ubicado en la actual ciudad de Kingston, Fort Henry fue construido entre 1832 y 1937 para reemplazar una fortificación existente desde la era de la guerra de 1812.Fue construido encima de Point Henry para proteger la base naval de Point Frederick, la entrada del Canal Rideau y Kingston, el cual era el principal punto de transbordo a lo largo de la ruta de suministros entre Montreal, Ottawa y todos los otros puntos del oeste.


El ejército británico formó una guarnición en Fort Henry hasta 1870 cuando las tropas de la reina Victoria se retiraron de Canadá. Seguidamente, la Batería "A", la escuela de Artillería, seguida por la Batería “B", tomaron el fuerte como residencia y permanecieron allí hasta 1891.

                                                           David, la chiva mascota del fuerte

Durante la Primera Guerra  Mundial, Fort Henry fue reparado superficialmente y usado como campo de internamiento para prisioneros políticos, principalmente allí sufrieron encierro unos 5000 ucranianos.




Fort Henry fue luego reconstruido entre 1936 y 1938 como resultado de un esfuerzo conjunto federal y provincial, que costó más de $1 millón de dólares.El fuerte fue abierto como museo y sitio histórico "en nombre de todos los soldados británicos que sirvieron allí" por el Primer Ministro Mckenzie King en agosto de 1838.Durante la Segunda Guerra Mundial, Fort Henry se convirtió en el Campo 31, un campo de prisioneros de guerra para los marinos mercantes enemigos, soldados, pescadores y aviadores. 

Reabierto en 1948, Fort Henry ha tenido millones de visitantes que han traspasado sus puertas para ver el espectáculo aclamado internacionalmente de su guardia.



En la actualidad, las marchas de los guardias continúan y Fort Henry sigue con su rol como museo y sitio histórico para los residentes de Kingston y visitantes del mundo entero. 


Una vez dentro de sus puertas de madera, los visitantes entran al reino de la vida militar del siglo 19, recorridos con guías experimentados, vistas escénicas, presentaciones musicales increíbles y demostraciones de precisión militar por la guardia del fuerte (formada por un grupo de estudiantes universitarios entrenados como si fueran soldados británicos de 1867).

En mi caso me recordó muchísimo a las fortalezas del Morro y de La Cabaña de La Habana, Cuba. Usted podrá ver personas representando la población civil del fuerte, tales como maestros de escuela y las esposas de los militares. 
                                                          Celdas                                                     

El fuerte también sirve como sede a numerosas ceremonias especiales y eventos que tienen lugar a lo largo de cada estación.
                                                   Comedor de los oficiales
                                                      Camas de los soldados 

Una de sus principales atracciones es el enorme patio con vista al río, considerado el mayor de su tipo en el país, donde usted puede sentarse a tomar y a comer mientras disfruta de una hermosa vista.



Fort Henry no tiene ninguna conexión con el Real Colegio Militar ni con las modernas Fuerzas Armadas Canadienses.

                                                              Mi mamá en Fort Henry